Cómo mantener la presión de aire adecuada en la planta de incubación

En las mencionadas plantas de incubación cerradas, existe el riesgo de que a las incubadoras no les llegue suficiente aire rico en oxígeno y que no se expulse la cantidad adecuada de aire «usado», con un alto contenido de CO2, de las instalaciones. Sin embargo, la probabilidad de que el aire fresco y usado se mezclen se reduce al mínimo cuando se separan los plenums de entrada y salida de la planta de incubación, tanto para las ponedoras como para las incubadoras.

Al mantener una presión de aire positiva en el plenum de entrada, se garantiza un suministro de aire fresco suficiente para las ponedoras e incubadoras, siempre que las máquinas estén diseñadas para aspirar el aire fresco por sí mismas y no precisen de una presión de aire elevada que empuje el aire hacia su interior.

Se han de evitar las presiones de aire positivas en los plenums de salida, a efectos de que las ponedoras e incubadoras expulsen el aire usado fácilmente. Bastará con que la presión de estas cavidades sea neutra, aunque generalmente se prefieren las presiones ligeramente negativas. Se han de evitar también las presiones excesivamente negativas o, de lo contrario, se podría llegar a contrarrestar el principio de ventilación de las propias incubadoras.

La higiene de los criaderos es otra razón igualmente importante para mantener diferentes presiones en las diferentes salas. El plenum de aire limpio de la zona de las ponedoras, tanto si se trata de la propia sala de las ponedoras o de un plenum independiente situado sobre dicha sala, ha de ser la zona más limpia de la planta de incubación, por lo que debe gozar de una presión más elevada que el resto de salas «sucias», como la sala de traslado (huevos bomba) o las salas de incubación (pelusa). Esto garantiza que el aire fluya de las salas limpias a las salas más sucias y no en la dirección opuesta.

Del mismo modo, el plenum de salida de la sala de incubadoras, a menudo conocido como el «túnel de pelusa», ha de mantenerse a una presión ligeramente negativa, con el fin de evitar la contaminación cruzada de otras salas de la planta de incubación con la pelusa de los pollos recién nacidos en las incubadoras. Una presión ligeramente negativa permite que la pelusa se asiente en el suelo del plenum, al que se puede acceder fácilmente para su limpieza. Sin embargo, si se aplica una excesiva presión negativa, se corre el riesgo de que la pelusa llegue al techo, desde donde podría volver a acceder a la planta de incubación a través de la unidad de tratamiento de aire, llegando a bloquear los filtros y a contaminar el aire limpio.

En las plantas de incubación en particular las mediciones de la presión del aire se realizan +/- en función de «cero», siendo cero la presión exterior. Por lo tanto, es importante que la sonda de presión de referencia se encuentre ubicada en una zona en la que no se vea afectada por el viento. La velocidad variable del viento tendrá un efecto diferente dependiendo de si se mide en el lado de barlovento o de sotavento de la planta de incubación, y la fluctuación en la presión de referencia externa puede afectar al control de presión dentro de la planta. Asimismo, se recomienda la instalación de un filtro de aire en el extremo de la sonda externa, con el fin de evitar que la sonda se obstruya con suciedad o incluso con insectos.

Consejo

• En plantas de incubación «cerradas», mantenga las presiones de aire de los plenums de entrada y salida de las zonas de las ponedoras e incubadoras de acuerdo con las recomendaciones del fabricante de los equipos de incubación.
• Mantenga las puertas cerradas: es la única forma de mantener diferentes niveles de presión dentro de la planta de incubación. Considere la opción de instalar puertas correderas automáticas
• Asegúrese de que el aire fluya en todo momento desde las zonas más limpias (sala de las ponedoras) a las más sucias.
• Asegúrese de que la presión de aire de referencia externa se mide de forma correcta y uniforme, desde una ubicación «neutra» con una fluctuación mínima.
• Lleve a cabo un mantenimiento periódico de las unidades de tratamiento de aire (filtros de aire), con el fin de garantizar un suministro de aire fresco suficiente y adecuado para las salas más importantes de la planta de incubación.